Parece mentira que tuviera que venir una pandemia y su consecuente confinamiento para que Vigo Marshall se planteara la posibilidad de dedicarse a la música. Agradecemos, pues, a aquel golpe de suerte que nos permitiera disfrutar del talento musical de este artista ilerdense. Si no hubiera sido por ello, nos estaríamos perdiendo un interesantísimo proyecto lleno de personalidad y basado en mimadas melodías. Sin duda, el broche de oro lo ponen sus letras vitales en las que siempre conseguimos vernos reflejados. Lógicamente, era cuestión de tiempo que este talento saliera a la luz y pudiéramos disfrutar de él. Sin embargo, también reconocemos que habría sido un gran error haberlo dejado guardado en una habitación como un hobbie más. Disfrutemos, pues, de un Vigo Marshall que parece crecer más y más con cada pequeño paso que da en su carrera.
Aún recordamos con emoción su brillante debut, que consiguió prender un “Incendio” sobre el frío mes de diciembre. Aquel tema arrollador nos permitió sobrevolar los campos de su Lleida natal, una ciudad de la que se confiesa enamorado. Además, trajo consigo un sonido pop guitarrero que recordaba al de algunos de sus ídolos, como Leiva o Carlos Tarque. Sin duda, nos encontrábamos ante un single debut enérgico que trataba un tema delicado, como es la decepción al descubrir que esa persona a la que admiramos no nos valora tanto como debería.
De nuevo, las letras vitales en las que vernos reflejados volvían a sucederse en su segundo single, “Hasta pronto”. En él, Vigo Marshall dejaba atrás su sonido guitarrero y su actitud canalla para abrirse en canal. La ocasión lo merecía, pues Vigo es un artista imprevisible que se mueve por aquello que le dicta el corazón. Así, durante el pasado mes de mayo nos sorprendía con una balada pop sencilla con tintes acústicos. Este tema, que no necesitaba adornos, se mecía sobre una desgarradora melodía de cuerda. Ésta parecía insuflar algo de fuerza para encarar la dura pérdida de un ser querido, aunque nunca resulta suficiente. Su abuelo, al que iba dedicada esta emotiva canción, debe estar realmente orgulloso allá desde donde la esté escuchando.
Apenas unos meses después, el artista ilerdense vuelve a sorprendernos con su tercer single, “Dime que no”. Se trata de un tema de estilo pop-rock guitarrero más similar a su single debut en cuando a sonido. Además, su letra trae consigo una historia vital en la que resulta sencillo verse representado. Todo transcurre durante un caluroso día de verano, durante el cual ocurre un flechazo amoroso totalmente inesperado. Al principio las miradas se cruzan, el resto del mundo se difumina y las sonrisas aparecen como por arte de magia. Sin embargo, para uno de los dos implicados esta complicidad es simplemente eso, sin llegar a convertirse en nada más. Al final, ambos se animan a conocerse más a fondo y el tonteo hace acto de presencia a través de una expresión -“Dime que no”- que viene a confirmarnos que ese juego de llevarle la contraria al otro puede acelerar las pulsaciones más de lo esperado. Indudablemente, este descubrimiento de personalidades termina convertido en una adorable historia de amor. Pasen y disfruten de su videoclip.
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